Chi Ning se despertó con un sudor frío.

Su cuerpo parecía haber sido empapado por la lluvia, y un escalofrío le recorrió la columna vertebral.

Sabía que estaba muerto, pero este lugar no se parecía en nada a los Manantiales Amarillos del infierno.

Chi Ning se aferró con fuerza a las mantas y observó con cierto horror el mobiliario que le rodeaba. Sillas de bambú, ventanas de madera, un libro a medio leer sobre su almohada y velas a punto de consumirse.

Este lugar se parecía al Salón Yaoguang, su dormitorio.

¿Cómo llegó hasta aquí?

El devastador sonido de los truenos aún estaba fresco en su memoria, Gu Lingxiao lo envolvió en un fuerte abrazo, y un momento antes de que perdiera el conocimiento, Chi Ning escuchó que le susurró unas cuantas palabras cerca de su oído.

¿Qué fue lo que dijo? Chi Ning se pellizcó el puente de la nariz tratando de recordar, pero todos los pensamientos dentro de su mente eran un completo desastre.

En efecto, no podía recordarlo.

¡Correcto! ¿Dónde está Gu Lingxiao?

No debe sucederle nada.

Chi Ning se puso apresuradamente una túnica y se levantó para ir en busca de alguna persona. Todo dentro del Salón Yaoguang era igual que antes, y justo cuando comenzaba a sospechar que todo era un sueño, abrió la puerta y vio un tierno y pequeño bollo de frijol de pie frente a él.

El pequeño bollo de frijol sólo tenía ocho años y lo miraba con los ojos muy abiertos. Con los ojos húmedos y la nariz moqueante, parecía como si fuera a estallar en lágrimas en cualquier momento.

Chi Ning exhaló lentamente y extendió su mano hacia el niño: —¿Qué pasa Lingxiao, alguien te intimidó?

Gu Lingxiao, con sus cortas piernas, levantó la cabeza para mirar al Maestro Inmortal, firme como el jade, que estaba a solo unos pocos pasos frente a él. La túnica blanca del hombre llegaba hasta el suelo, sus ojos de fénix estaban ligeramente abatidos, con una mano extendida hacia él, su palma era fina y uniforme, y debía estar caliente y suave al tacto.

Su Shizun, vivo de nuevo.

Gu Lingxiao tardó un momento en aceptar el hecho de que se había convertido en un niño de piernas cortas otra vez. Agarró la mano de Chi Ning y le dijo de manera conmovedora: —Tuve una pesadilla… Había un fantasma persiguiéndome…

El Venerable Demonio, que solía asesinar sin pestañear, estaba siendo tan desvergonzado, actuando como un niño mimado. Claramente, él era el más vicioso de todos los fantasmas y demonios, capaz de asustar hasta las lágrimas a los niños de todo el mundo.

Chi Ning estaba tan angustiado que rápidamente se arrodilló y abrazó suavemente al niño: —Los Zai Zai no tienen miedo, si viene un fantasma, lo ahuyentaré con mi espada.

En el dialecto de la ciudad natal de Chi Ning, a los niños se les llamaba Zai Zai. Cuando dijo estas dos palabras, su voz fue ligera y gentil, como un pez nadando en círculos y creando ondas en la superficie de un lago.

Gu Lingxiao había sido llamado Zai Zai durante más de diez años, y sentía que este apodo era infantil y molesto, pero cuando lo escuchó de nuevo, su corazón se sintió tan cómodo que no podía esperar a que Chi Ning lo llamara así una vez más.

El abrazo en el que Gu Lingxiao estaba envuelto se volvió cada vez más apretado, el corazón de Chi Ning estaba latiendo como un tambor.

Resulta que Gu Lingxiao estaba sano y salvo, volvió a ser un niño, que lloraba pegado a él.

Chi Ning llevó a Gu Lingxiao, de ocho años, de regreso a su habitación. El pequeño bollo de frijol se sentó en el borde de la cama, sus pequeñas y cortas piernas no podían tocar el suelo, por lo que las balanceaba en el aire: —Fue un sueño tan aterrador… Shizun, tengo miedo de dormir solo.

Cuando Chi Ning le llevó al niño pasteles fritos de azúcar para que comiera, le preguntó por los detalles de la pesadilla, pero Gu Lingxiao tartamudeó y dijo que no podía recordarlo, limitándose a agachar la cabeza para comer los bocadillos.

Al terminar de comer, la comisura de sus labios estaba cubierta con migajas, sus ojos de obsidiana miraron a Chi Ning: —El Shixiong dijo que no te gusta que te molesten, pero… ¿puedo dormir aquí?

Gu Lingxiao era tan lindo y encantador que Chi Ning no pudo resistirse a acariciarle la cabeza, y le dijo: —Puedes, pero ya es muy tarde, así que ve a dormir.

Gu Lingxiao se regocijó y se metió hábilmente bajo las mantas.

Se tendió en el lugar donde Chi Ning acababa de estar acostado, el edredón de brocado estaba impregnado con el olor del cuerpo de Chi Ning, era el olor del sándalo mezclado con la flor del ciruelo.

Chi Ning trajo otro edredón y se acostó en el borde de la cama.

…

No podía dormir. Chi Ning no podía conciliar el sueño, estaba preocupado pensando que podría molestar a Gu Lingxiao, por lo que se limitó a acostarse en silencio y sin hacer ningún movimiento, incluso su respiración se suavizó.

Su mente estaba abrumada y llena de pensamientos que eran difíciles de reprimir.

Existen dos maneras de volver de entre los muertos.

La primera es el renacimiento, implica tomar a la fuerza y ocupar el cuerpo de otra persona con tu propia alma, éste método provocará cambios tanto en la apariencia física de dicho cuerpo, así como en sus raíces espirituales.

La segunda es la recuperación del alma, se utiliza un arma mágica para reunir los fragmentos del alma que se han dispersado en las cuatro direcciones cardinales del cielo y la tierra en un solo lugar, para introducirlas nuevamente en el cuerpo humano, el efecto es como un árbol marchito que se encuentra con la primavera, permitiendo así prolongar la vida de una persona.

Claramente, Chi Ning no entra en ninguna de estas dos categorías, es una variable fuera de las reglas.

Ya que volvió quince años atrás, Chi Ning no volverá a cometer los mismos errores.

Ocho años, Gu Lingxiao solo tiene ocho años ahora. Es decir, trajo a Gu Lingxiao al Pico Cuyu hace un año y su discípulo aún no ha cometido ningún pecado.

Gu Lingxiao aún no es un demonio malvado más allá de la redención, tiene la oportunidad de cultivar en el camino recto y convertirse en el cultivador más destacado de su generación.

Gu Lingxiao se giró hacia Chi Ning, con su bonita carita rosada por el sueño soltó un suave suspiro, murmurando algunas palabras mientras seguía profundamente dormido.

Chi Ning miró hacia arriba, y pensó: El dolor del pasado, no volverá a suceder.

Protegerá a Gu Lingxiao. ¿Y qué si los rumores son como espadas? ¿Y qué si su línea de sangre es especial? Él es su Shizun y lo protegerá del viento y la lluvia, permitiéndole vivir con orgullo y libertad.

—Crece bien, buen Zai Zai.

Traducido por Harilind

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