Capítulo 003:La gente de la familia Jiang ha llegado

Efectivamente, no mucho después, la gente de la familia Jiang llegó. Y trajeron muchos regalos de compromiso, muchos más que los regalos de compromiso y la dote sumados de una boda normal. Al verlos, la familia Yu estaba tan feliz que no podía “cerrar la boca”, pero tuvieron que fingir calma y mantener las apariencias.

Ese mismo día, Yu Jinli se fue con la gente de la familia Jiang.

Y cuando la gente de la familia Jiang vio a Yu Jinli, inconscientemente volvieron a mirar de reojo a Yu Jinsheng, pero no dijeron nada. Aun así, se llevaron a Yu Jinli de regreso.

Al ver que la gente de la familia Jiang se había ido, Sun Dumei y Yu Jinsheng finalmente soltaron un suspiro de alivio, sintiéndose afortunados de haber esquivado una calamidad.

Yu Jinli, que se iba con la gente de la familia Jiang, no sintió gran cosa. Después de todo, acababa de llegar a este mundo, todo era desconocido. Para él, lo más importante era adaptarse primero a este mundo.

Aunque Yu Jinli había recibido los recuerdos del propietario original, debido a que el propietario original había vivido siempre bajo la persecución y el tormento de la familia Yu, y no había ido a la escuela, solo tenía un conocimiento a medias del mundo exterior. Por lo tanto, para Yu Jinli, su comprensión de este mundo todavía era demasiado escasa.

La persona enviada por la familia Jiang era el viejo mayordomo de la familia Jiang, quien tenía una posición considerable en la familia. Al ver la apariencia tranquila y tímida de Yu Jinli durante todo el camino, no pudo evitar mostrar una sonrisa amable.

Aunque lo que la familia Yu hizo esta vez fue muy inapropiado, pero al pensar en la situación actual de la familia Jiang, y pensar en el joven amo, a quien había visto crecer, ahora postrado en cama, no pudo evitar suspirar en su corazón.

Y fue precisamente por la condición física de Jiang Mosheng que la boda no podía celebrarse temporalmente. Por eso, la familia Jiang sentía algo de culpa hacia la familia Yu, y fue por eso que permitieron que la familia Yu hiciera que el hijo ilegítimo se casara, después de todo…

—Soy el mayordomo de la familia Jiang, puedes llamarme Tío Jiang. No te preocupes, la Señora y el Señor son muy buenas personas, no serás intimidado en la familia Jiang —dijo el viejo mayordomo amablemente.

Este joven, aunque su personalidad era un poco tímida y débil, esos ojos eran extremadamente puros. Cuando miraba directamente a la gente, siempre hacía que uno no pudiera evitar ablandarse, y la voz al hablar también se volvía amable, como si temieran que un sonido más fuerte pudiera asustarlo.

—Mhm, gracias, Tío Jiang —respondió Yu Jinli con una sonrisa tímida. La pequeña sonrisa hizo que ese rostro, ya de por sí delicado, se volviera aún más atractivo.

Por supuesto que Yu Jinli no estaba preocupado por su situación. Después de todo, el cuerpo de este viejo mayordomo de la familia Jiang estaba rodeado de una gran cantidad de niebla roja, eso representaba la buena fortuna.

Una familia que incluso su mayordomo llevaba tanta buena fortuna, debía ser una familia de gran riqueza y nobleza. En tal hogar, él estaría más que feliz, ¿cómo podría tener miedo?

En realidad, justo cuando acababa de transmigrar, Yu Jinli descubrió que su habilidad innata para ver claramente el “camino de la suerte” de una persona también lo había seguido, lo cual lo puso muy feliz.

Él era un Koi de transmutación de suerte. Había nacido con la habilidad de ver claramente el camino de la suerte en los demás y, por supuesto, también tenía la habilidad de ayudar a otros a transmutar su suerte.

Simplemente que, esto de transmutar la suerte, rara vez lo hacía por otros. Después de todo, algo como la suerte es limitado.

Es como si la suerte de una persona en la vida tuviera un límite. Si ayudaba a alguien a transmutar su suerte, haciéndolo afortunado, entonces inevitablemente estaba “sobregirando” la suerte futura de esa persona, y era muy probable que esa persona pasara su vejez en la pobreza.

Claro que, si no se sobregiraba la suerte futura de uno mismo, entonces se debía tomar prestada la suerte de otros. Pero este tipo de transmutación de suerte iba aún más en contra del Dao del Cielo, y en casos graves podía costar la vida humana. Yu Jinli, siendo un yaojing que cultivaba siguiendo el Dao del Cielo, no estaba dispuesto a hacer tal cosa.