You XiaoMo levantó la cabeza y vio la gigantesca casa de subastas que se alzaba frente a él. No pudo evitar sorprenderse.

Esta casa de subastas era realmente demasiado grande. Incluso la estructura icónica de los Juegos Olímpicos, el “Nido de Pájaro”, no era tan grande como este Big Mac frente a sus ojos. En ese momento, hizo un viaje especial allí para ver los Juegos Olímpicos. Entonces quedó impresionado por la grandiosidad y el tamaño del Nido de Pájaro. Ahora, mirando la casa de subastas de la ciudad HunJi, se dio cuenta de que no había comparación entre estas dos cosas.

El Nido de Pájaro ni siquiera era la mitad del tamaño de la casa de subastas. Además, el material de construcción obviamente no era algo ordinario, ya que estaba completamente construido con piedra de color negro. No estaba claro cuántos años tenía, pero no había signos de desgaste en la superficie.

El nombre de este Big Mac era la Casa de Subastas Siete Estrellas. Se decía que estaba respaldada por el maestro de la ciudad HunJi, un as muy fuerte y poderoso. Bajo su mando había muchos soldados fuertes y generales valientes. Es por eso que nadie se había atrevido a causar problemas en la Casa de Subastas Siete Estrellas.

Fuera de la puerta de la Casa de Subastas Siete Estrellas, había unos veinte guardias equipados con armas afiladas y vestidos con uniformes negros. Sus ojos eran penetrantes como halcones, constantemente fijos en las personas que entraban y salían en la calle, así como en las personas que entraban y salían de la casa de subastas. You XiaoMo podía sentir vagamente el poder que emanaba de ellos, su asombro mostrándose en sus ojos. Estas personas eran realmente impresionantes. No es de extrañar que esta fuera la tercera ciudad más grande del Continente Long Xiang. Detrás de su prosperidad había un líder poderoso.

Cuando aparecieron, siete u ocho de los veinte guardias vestidos de negro fijaron sus ojos en ellos. Para ser precisos, cayeron sobre Ling Xiao. En cuanto al pequeño You XiaoMo, fue completamente ignorado por ellos.

Después de salir del carruaje, Ling Xiao acarició al Caballo de Fuego Furioso cerca de su oreja y dijo suavemente: —Ve. Encuentra un lugar por tu cuenta y espera.

Con esas palabras, el Caballo de Fuego Furioso giró el carruaje y galopó hacia la puerta de la ciudad.

You XiaoMo escuchó el ruido y se dio la vuelta para presenciar esta escena. Exclamó y estaba a punto de correr para traer de vuelta al Caballo de Fuego Furioso cuando Ling Xiao lo detuvo con calma.

—¿Por qué me detuviste? El caballo se escapó— You XiaoMo inmediatamente dijo con ansiedad.

—No te preocupes, no podría escaparse— Ling Xiao lo consoló.

You XiaoMo se dio la vuelta y lo miró. Parecía ponderar la verdad en sus palabras, pero no importaba si era verdadero o falso, ya era demasiado tarde porque el Caballo de Fuego Furioso se había ido sin dejar rastro.

Bajo la atenta mirada de los guardias vestidos de negro, Ling Xiao simplemente levantó a You XiaoMo y se fue con el flujo de personas hacia la casa de subastas.

Aunque la subasta no había comenzado, había bastante gente entrando y saliendo. Un flujo interminable de personas se movía dentro del vasto interior. You XiaoMo todavía estaba asombrado por el enorme espacio cuando Ling Xiao lo bajó y lo llevó hacia el centro del gran salón.

Justo encima del centro del gran salón había una pantalla negra que parecía estar hecha de jade. En la pantalla, muchos artículos pasaban desplazándose. Había píldoras mágicas, hierbas mágicas, manuales de entrenamiento del alma y otros artículos para subastar. El más bajo era de nivel cuatro. Para casas de subastas de gran escala como Siete Estrellas, las píldoras mágicas y hierbas mágicas de bajo nivel no calificaban para aparecer.

You XiaoMo estiró la cabeza aquí y allá revisando las cosas en la pantalla. Para otros, estas eran cosas ordinarias. Pero para él, estas cosas eran precisamente lo que necesitaba. En cuanto a las cosas raras que no aparecían en la pantalla, incluso si lograba obtenerlas, no tendría la oportunidad de disfrutarlas por ahora. Además, actualmente era un pobre, con solo unas diez piezas de oro con él.

Ling Xiao echó un vistazo y sus ojos cayeron en una habitación de piedra que tenía un letrero que decía evaluación de tesoros colgando en la parte superior. Dos hombres fuertes y robustos estaban parados en la puerta. Al verlos acercarse, los miraron antes de dejarlos entrar.

You XiaoMo asomó la cabeza desde detrás de Ling Xiao y miró asombrado las numerosas habitaciones secretas pequeñas y estrechamente espaciadas. Uno podía ver vagamente el movimiento de personas dentro. Este tipo de separación aseguraría que las personas que traían sus tesoros para ser evaluados no tuvieran que mostrar a otros los tesoros que tenían. De esta manera, se podría evitar atraer la atención de personas engañosas y codiciosas.

Justo cuando estaba mirando esto, una asistente femenina escasamente vestida se acercó a ellos, los senos blancos como la nieve a punto de salirse, el factor revelador no era menos que en los tiempos modernos. Los ojos de la asistente pasaron por You XiaoMo y finalmente se fijaron en el alto y guapo Ling Xiao, revelando inmediatamente una sonrisa coqueta. Dijo con una voz que hacía que el oyente se sintiera débil de rodillas: —Los dos señores están aquí para evaluar tesoros o para enviar artículos para subastar?

Ling Xiao simplemente respondió con una palabra cuando vio a You XiaoMo mirando a la asistente con una expresión atónita. Inmediatamente se sintió disgustado y frunció el ceño. La asistente pensó que a Ling Xiao no le gustaba esta manera de hablar, por lo que inmediatamente cambió su forma de asistencia, llevándolos respetuosamente a una habitación secreta.

Cuando se dio la vuelta, Ling Xiao agarró a You XiaoMo y dijo con descontento: —¿Qué estás mirando?

You XiaoMo no notó su expresión, exclamando: —No esperaba que las mujeres de aquí fueran tan abiertas. Había pensado que serían más conservadoras. ¡Es demasiado impactante!

—Entonces, ¿te gusta este tipo de mujer?— Ling Xiao entrecerró los ojos y preguntó suavemente.

—¡Cómo es eso posible!— You XiaoMo refutó sin pensar. Luego agregó: —Todavía prefiero a alguien inocente con cejas bonitas. Esta es demasiado atrevida. No me gusta.

Cuando lo escuchó refutar en voz alta, la expresión de Ling Xiao inmediatamente se suavizó considerablemente. Pero antes de que pudiera estar feliz por unos segundos, escuchó lo que continuó diciendo. Inmediatamente surgieron densas nubes de tormenta peligrosas y, sin embargo, cierta persona todavía no se dio cuenta de lo que estaba sucediendo.

—¿Te gustan las inocentes con cejas bonitas?— Ling Xiao lo abrazó con fuerza. Su aliento claramente estaba ardiente, pero las palabras eran frías y siniestras, congelando tres pulgadas de profundidad. De sus palabras, dedujo que las cejas bonitas se referían a las mujeres.

Un joven obtuso finalmente se dio cuenta. Levantó la cabeza y vio a Ling Xiao sonriendo muy dulcemente. Incluso sus ojos estaban sonriendo. Era solo que era una sonrisa bastante negra. Inmediatamente las campanas de alarma comenzaron a sonar en el corazón de You XiaoMo.

Es el fin. El fin. Nunca había visto a Ling Xiao sonreír así desde que lo conoció. El siglo XXI tuvo el Viernes Negro. Ling Xiao tenía la Sonrisa Negra…

—Li… Ling-shixiong, nosotros… deberíamos entrar…— You Xiao tembló de miedo mientras hablaba. El hombrecito en su corazón derramó lágrimas en su lugar. ¿Qué pasó esta vez? ¡Lágrimas!

Ling Xiao sonrió ligeramente: —Todavía no has respondido mi pregunta.

El horror. En comparación con cuando veía películas de terror, esta sonrisa lo hacía sentir aún más aterrorizado. Por Dios. Tenía una corazonada de que esta sonrisa probablemente lo asustaría toda su vida. Ahora, mirándolo sonreír así, su corazón estaba lleno de miedo.

—Eso… has malinterpretado.…— You XiaoMo tragó saliva, sus globos oculares girando y girando mientras intentaba con todas sus fuerzas encontrar una salida.

—¿Qué malinterpreté?— Ling Xiao entrecerró los ojos.

Los ojos de You XiaoMo giraron y giraron mientras decía nerviosamente: —Lo que quise decir con gustar, en realidad… en realidad significa apreciar. Eso es correcto. Quiero decir apreciar. Justo ahora también viste. Esa asistente vestida tan reveladoramente, hasta el punto de indecencia, ofendiendo los ojos. Este tipo de mujer, a nadie le gustará. Entonces, una que sea bastante inocente es mejor. Al menos no se saldrá de control….

Ling Xiao levantó las cejas y lo miró durante mucho tiempo, entrecerrando los ojos: —¿Es así?

You XiaoMo se secó un puñado de sudor de su frente mientras asentía con la cabeza en afirmación: —Por supuesto.

¿Cómo se atrevería a decir que no era así? Si realmente sacudiera la cabeza y dijera eso, Ling Xiao lo mataría. ¡Su vida en ciernes estaba a punto de florecer y no quería morir tan pronto!

—De hecho, hay algo de verdad en tus palabras.…— Ling Xiao guardó su mirada amenazante, su rostro guapo finalmente recuperando su falsa gentileza original. Lo golpeó ligeramente en el hombro y sonrió mientras decía: —Te dejaré ir esta vez.

You XiaoMo olfateó trágicamente, casi abrumado de gratitud. El cielo sabía que la cantidad de sudor frío que goteaba en ese momento era igual a la suma de todos los días anteriores.

Los dos entraron en la habitación secreta que la asistente les indicó. You XiaoMo inmediatamente cerró la puerta con entusiasmo. La puerta de la habitación secreta estaba hecha de hierro. Era muy gruesa, capaz de bloquear el sonido, evitando que las personas escucharan desde afuera.

La habitación secreta no era grande y justo en el medio había un hombre viejo de cabello gris que estaba parado allí vestido con una túnica negra. Su rostro estaba cubierto de profundas arrugas, pero sus ojos brillaban astutamente. En este momento, su mirada penetrante los estaba evaluando.

You XiaoMo descubrió que este anciano parecía ser un mago. En cuanto a por qué lo sabía, era porque podía sentir que el alma de este último era bastante fuerte y los practicantes no eran magos. No tenían forma de entrenar el alma, por lo que sus almas eran un poco más débiles en comparación con los magos.

—Por favor, tomen asiento— El anciano señaló las dos sillas frente a la mesa. Después de sentarse, dijo con calma: —El tesoro que los dos señores desean que sea evaluado, pueden sacarlo ahora.

You XiaoMo se sentó y luego sacó un bloque de hielo del tamaño de una cabeza de su bolsa mágica y lo puso sobre la mesa.

El anciano esperaba que sacaran píldoras mágicas y cosas por el estilo. De repente, apareció algo que parecía un bloque de hielo, por lo que no pudo evitar entrecerrar los ojos. Aunque estaba un poco sorprendido, no era poco común, ya que las cosas que podían subastarse generalmente serían bastante extraordinarias. Cuando su fuerza del alma sintió el bloque de hielo, su cuerpo se estremeció ferozmente. Inmediatamente sus ojos se abrieron de par en par: —Esto es…

El anciano acercó el bloque de hielo bajo su nariz y lo olió. Su rostro cambió: —¿Esto es líquido espiritual?

El líquido espiritual era un tipo de tesoro que era algo extremadamente raro en el Continente Long Xiang. Como podía renovar inmediatamente la fuerza espiritual de los practicantes, si en medio de una batalla, este tipo de cosa equivalía a una píldora mágica que salva vidas. Era algo que los practicantes anhelaban tanto que incluso soñaban con ello. Siempre había sido algo que no tenía precio, pero nadie quería vender.

You XiaoMo asintió: —Esto es solo una pequeña pieza. Por favor, échale un vistazo y determina a qué precio se puede subastar.

El anciano calmó la emoción en su rostro y echó otro vistazo cuidadoso. Reflexionó un poco antes de decir: —Esto es de hecho líquido espiritual. Pero no es puro. Hay bastante impurezas dentro. Necesita ser refinado antes de usarlo. Pero así, este tamaño solo resultará en una gota de líquido espiritual real. Según las pautas de estimación de la ciudad HunJi, una gota de líquido espiritual es al menos cien mil.

You XiaoMo inmediatamente sintió una miríada de cosas diferentes.

Un bloque de este tamaño solo podría producir una gota de líquido espiritual real. Pero lo que lo consoló fue que el precio de una gota era de cien mil. Esta suma superó sus expectativas, ya que pensó que sería diez mil como máximo.

Traducido por Ji Shenn

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