Capítulo 17

Cuando regresó a la oficina, ya era la tercera hora de clases, y la apariencia de Shen Luyang, con los brazos cruzados y la comisura de los labios amoratada, atrajo de inmediato las miradas.

Zong Wei Qing no estaba en clase, tampoco estaba Shi Fan, solo se encontraban Jiang Nuanyu y otros dos profesores de los salones vecinos.

Jiang Nuanyu lo examinó rápidamente y luego, con cierta sospecha, miró a Xie Wei Han, quien estaba detrás de él, y preguntó con indiferencia: —¿Se han peleado ustedes dos?

—Sí —asintió Shen Luyang con solemnidad—, le dije que quería experimentar la diferencia en nuestra capacidad de combate, y el profesor Xie amablemente accedió a mi insolente solicitud.

Jiang Nuanyu entrecerró los ojos, dejando claro que no le creía ni una palabra.

De hecho, con las habilidades físicas de Shen Luyang como un simple Alfa, si Xie Wei Han realmente quisiera pelear, no tendría que acercarse demasiado, ya que tendría innumerables formas de acabar con él.

Shen Luyang volvió a recurrir a la misma excusa poco creíble pero siempre útil: —Me caí por las escaleras sin querer, ¡me duele mucho!

Jiang Nuanyu resopló y bajó la cabeza para continuar corrigiendo los trabajos.

Era evidente que tampoco le creía esa historia.

Shen Luyang no se preocupó por su expresión, y con una cara suplicante, se aprovechó de la amistad que tenía con Jiang Nuanyu para pedirle un par de vendajes después de mentirles a ambos.

Jiang Nuanyu lo observó mientras Shen Luyang, como un tonto, tomaba los vendajes y se apresuraba a compartirlos con Xie Wei Han.

Era como un perro que se acurruca junto a su dueño, buscando atención y cariño. Sin conciencia del peligro que lo rodeaba, creyendo que era un perro muy guapo. Brillante pero ingenuo.

Encarnaba perfectamente el dicho de que “los tontos tienen suerte”.

El lobo solitario y despiadado, por alguna razón, decidió quedarse con ese perro.

No se sabía qué lo motivaba exactamente. En cualquier caso, no podía ser algo bueno.

—La última vez me diste dos vendajes, veo que no tienes más en tu estuche —Shen Luyang colocó los vendajes sobre el escritorio de Xie Wei Han—, fueron dados por la profesora Jiang. ¡Vaya, este diseño es un poco excesivo! No es que yo sea feo, pero esto es demasiado lindo…

Xie Wei Han levantó ligeramente la mirada y dirigió sus ojos hacia Jiang Nuanyu, quien lo estaba observando con cautela y apartó la mirada en el mismo instante en que captó su atención.

Esta era la verdadera reacción de un Alfa al encontrarse con él.

Lo más básico, el instinto de evitar riesgos.

Él levantó la cabeza, curvando ligeramente los labios, y con una mirada suave, observó a la persona frente a él, que apoyaba su brazo en su escritorio y jugaba desprevenidamente con dos vendajes con dibujos animados, con una expresión seria y perpleja.

Él era especial, único hasta ahora.

—Este es más adecuado para ti —señaló Xie Wei Han el vendaje con un diseño de un pequeño sol, con una brillante sonrisa sobre él.

Shen Luyang recogió ese vendaje y tomó una decisión con facilidad: —Entonces, este es para ti.

El escritorio quedó con un vendaje rojo, impreso con un símbolo de veneno de dibujos animados. Pero era muy lindo.

Shi Fan regresó a la oficina al mediodía.

Shen Luyang estaba indeciso entre la opción de “fideos salteados” y “empanadas al vapor” en la aplicación de comida para llevar en su teléfono cuando, de repente, una figura alta y delgada se paró frente a él. Sin esperar a que levantara la cabeza, una voz familiar y suave resonó.

—¿Tienes un momento, profesor Shen?

Shen Luyang dejó su teléfono y miró a Shi Fan, cuyos ojos parecían cansados, y sonrió: —Claro, ¿qué sucede, profesor Shi?

Aparentemente, aunque los protagonistas de la relación de ataque y sumisión habían terminado, todavía había un fuerte vínculo entre ellos. Hasta ahora, la expresión de Shi Fan se veía muy afectada.

No era algo en lo que Shen Luyang pudiera intervenir fácilmente.

Shi Fan miró a su alrededor y luego dijo: “

—¿Podemos hablar afuera?

Shen Luyang se puso de pie: —Por supuesto.

Fue la primera vez que subieron al techo del edificio educativo. Shen Luyang miró a su alrededor con curiosidad. Parecía que alguien limpiaba el lugar regularmente, el suelo estaba limpio y no había declaraciones de amor de estudiantes en las paredes.

La vista también era hermosa, se podían ver las montañas a lo lejos, pero hacía mucho viento y estaba un poco frío.

Shen Luyang se bajó las mangas, estuvo tentado de meter las manos en los bolsillos y calentarse junto a la pared.

Considerando la expresión seria de Shi Fan en ese momento, abandonó esa idea irrealista y se frotó los brazos antes de preguntar: —Profesor Shi, no debería haber mucha gente aquí, ¿qué quieres decirme?

Shi Fan bajó la cabeza y, después de un momento, respiró profundamente, como si hubiera tomado una decisión, y lo miró: —Profesor Shen, hoy quiero disculparme contigo.

—No es necesario, profesor Shi —dijo apresuradamente Shen Luyang, agitando las manos—, fue una decisión mía, no tienes que sentirte culpable, esta pequeña herida no significa nada para mí.

Shi Fan frunció el ceño con culpa y su mirada mostraba preocupación: —Profesor Shen, quiero advertirte que la familia de Duan Chen… tiene mucho poder. Fue enviado a esta escuela por orden de su familia, incluido el director, y nadie puede controlarlo. También… estoy preocupado de que pueda hacerte daño por lo que hice. Ten cuidado.

Shen Luyang recordó lo que el sistema le había dicho antes, que Duan Chen también fue “reclutado” por su familia para venir a la escuela y que su familia era muy influyente.

Probablemente podría pedirle al director que despidiera a un profesor sin esfuerzo.

Al ver la lucha en la expresión de Shi Fan, como si estuviera a punto de negociar condiciones con el “atacante basura” en su nombre, Shen Luyang recordó a la madre de Shi Fan que había conocido ayer.

Recordando su cuidado y cariño, una cálida sensación cruzó los ojos de Shen Luyang y sus labios se curvaron: —No te preocupes por eso, profesor Shi.

Si Fan lo miró confundido.

Shen Luyang cruzó los brazos y con una expresión enigmática, imitando a los ricos mimados que había visto en la televisión, se apoyó despreocupadamente en la pared y chasqueó la lengua: —¿Quién no tiene un padre?

Después de todo, se trataba de hacer alarde de las influencias paternas.

También era alguien a quien su padre había enviado y él también podía hacer que el director se retractara en tres segundos. También conducía un Porsche todos los días al trabajo. En resumen, Shen Luyang también era un riquillo muy poderoso.

Shi Fan se quedó atónito ante su actitud razonable y arrogante, y después de un buen rato, respondió confundido: —Entonces, profesor Shen, ten cuidado tú también. Temo que él…

Esta vez, Shen Luyang se tomó un poco más en serio, entrecerró los ojos y miró a Shi Fan: —¿Él me amenace?

Shi Fan no respondió directamente. —Él es un Alfa de alto nivel, mientras que nosotros solo somos Alfas comunes. Si él quisiera hacerte daño, encontraría muchas formas de hacerlo sin dejar evidencia.

Shen Luyang estaba pensando en cómo evitar las posibles represalias de Duan Chen, pero Shi Fan planteó una opción más simple y directa: “supresión del nivel de feromonas”.

Ahora Shen Luyang se sintió completamente aliviado. Tenía a Xie Wei Han como su protector, así que no tenía que preocuparse por eso.

Después de tranquilizar las emociones de Shi Fan, Shen Luyang hizo su pedido de empanadas con alegría. Originalmente, quería compartir los resultados de su investigación sobre lugares para comer con Xie Wei Han, pero desde la cuarta clase hasta ahora, Xie Wei Han no había estado en la oficina.

Zong Wei Qing dijo que lo habían llamado los líderes de la escuela.

Shen Luyang no le dio mucha importancia. Después de todo, Xie Wei Han era un profesor excelente, mucho mejor que él, un empleado temporal. Era comprensible que estuviera ocupado.

Llegó la tercera clase de la tarde, la clase de física de Shen Luyang. Después de comer y jugar al bádminton con Jiang Nuanyu durante media hora, Shen Luyang se dirigió alegremente hacia su clase, sosteniendo su libro.

Siendo nuevo, solo se le asignó la clase de segundo año 21, por lo que su carga de trabajo era más ligera en comparación con Xie Wei Han, quien solía enseñar dos clases, incluyendo la clase destacada 1.

Sin embargo, por alguna razón, él decidió quedarse con el grupo de ciencias de la clase 21.

Mientras caminaba por los bulliciosos pasillos donde las clases acababan de comenzar, notó que el ruido dentro del aula 21 era notablemente bajo.

Shen Luyang sonrió. Parecía que los amigos de Peng Jun eran leales y habían decidido mantener la disciplina en el aula como muestra de agradecimiento por haberlos “salvado”.

Subió al estrado y se preparó.

Peng Jun y sus amigos fueron suspendidos de clases, y antes de que llegaran a casa, sus teléfonos móviles estaban llenos de mensajes preguntando qué había pasado con “el Sr. Shen”.

A pesar de los desacuerdos anteriores con Shen Luyang, los cuatro amigos fueron sorprendentemente honestos y describieron a Shen Luyang como una especie de superhéroe capaz de luchar, protegerse y esquivar cualquier problema.

Esto hizo que “el Sr. Shen” se convirtiera de la noche a la mañana en una figura misteriosa y poderosa en la mente de los estudiantes de la clase 21, conocido como “el jefe Shen”, “el misterioso Sr. Shen” y “ese hombre”.

Al ver las heridas en el rostro de Shen Luyang, Zhan Jingmiao, que estaba en la primera fila, exclamó sorprendida: —¡Profesor, estás herido!

El grito rompió el silencio, y el ruido en el aula regresó de inmediato, como si hubieran presenciado algo increíble.

Shen Luyang esperó unos veinte segundos y luego levantó la mano para pedir silencio. Siguiendo la misma excusa utilizada por todos, se limpió la comisura de los labios con la parte trasera de la mano y dijo: —Me caí por las escaleras, me duele mucho. Dejen de preocuparse y empecemos la clase.

Era evidente que eran jóvenes inmaduros que usaban los vendajes para ocultar sus peleas.

Shen Luyang ladeó ligeramente la comisura de los labios, satisfecho con la disciplina en la fila trasera.

Cuando estaba explicando un punto de conocimiento, al tomar la tiza para escribir una letra, sintió un dolor en el brazo.

Inhaló profundamente, Shen Luyang intentó ocultar las secuelas de su valiente acto y continuó escribiendo con el brazo tensado, sin que ninguno de los estudiantes notara su incomodidad.

—En dos días empiezan las vacaciones del Día Nacional, así que es posible que tengan un poco más de tarea estos días —Shen Luyang dejó de apoyar el codo en el escritorio, y simplemente se recargó junto al pizarrón mientras les hablaba a sus alumnos—. El Día Nacional es para relajarse y divertirse, ¿no les gustaría pasar el día divirtiéndose y no tener que resolver problemas de física cuando lleguen a casa, verdad?

Hubo una serie de aprobaciones en la clase.

Uno de los estudiantes aprovechó la situación: —Profesor, ¿podríamos no tener tarea para hoy y mañana también?

Shen Luyang miró sorprendido al estudiante en la cuarta fila junto a la puerta: —Joven, nunca había escuchado una solicitud tan irrazonable cuando yo estaba en la escuela.

Los estudiantes se rieron: —¿Eras un buen estudiante, profesor?

Shen Luyang alzó una ceja y respondió con confianza: —Claro que sí, si preguntan en mi escuela anterior, ¿quién no conoce al ejemplar estudiante Shen Luyang?

Después de clase, justo cuando Shen Luyang llegó a la puerta del aula contigua, fue abordado por cuatro chicos liderados por Peng Jun.

—¿Qué pasa aquí? —Shen Luyang rodeó el hombro de Peng Jun y lo llevó aparte—, ¿están acosando a alguien aquí, planeando una pelea?

Peng Jun: —…

¿Por qué sabes tanto sobre cómo pelear?

Li Shenyu frunció el ceño mientras miraba el pequeño parche del brazo de Shen Luyang, donde había moretones y magulladuras.

—¿Fue obra de You Bohao y su pandilla?

Shen Luyang lo miró: —¡No puede ser! A menos que…

El rostro de Li Shenyu se tensó.

Shen Luyang continuó: —Su pandilla tiene miembros en nuestra escuela.

Li Shenyu: —…

Con seriedad, Shen Luyang analizó las posibilidades y les dijo: —Si es así, entonces es probable que tenga problemas mentales o un trastorno cognitivo…

—No digas más —Li Shenyu inhaló profundamente, inusualmente inquieto—, no hay nada de lo que quiera oír.

Shen Luyang se contuvo para no reír: —De acuerdo.

Un grupo de chicos rebeldes pero buenos en el fondo.

Shen Luyang les dio un caramelo como consuelo, sin importar si lo querían o no, y luego regresó a su oficina.

Justo cuando abrió la puerta de su oficina, escuchó la voz apagada del profesor de química del aula contigua, Gong Wanjun.

—Acabo de regresar de la oficina del director y me enteré de que el profesor Duan Chen tuvo un accidente automovilístico.

—¡Dios mío, espero que esté bien!

—Sólo escuché fragmentos, parece que fue un accidente causado por conducir cansado, ambos brazos están fracturados, se cortó la cara y la barbilla estaba llena de sangre…