Yan Tianhen tragó saliva con dificultad, sus ojos brillando de admiración: —Dage, eres realmente demasiado asombroso, incluso el mejor artesano de la familia Qi no se puede comparar contigo.
Lin Xuanzhi siempre ha tenido un temperamento muy firme, pero cuando escucha los cumplidos de Yan Tianhen, no puede evitar sentirse un poco satisfecho consigo mismo.
—Naturalmente tengo un cierto talento para la artesanía —Lin Xuanzhi dijo—, Y algunos de los métodos de cultivo utilizados por los artesanos no requieren un Dantian. Puedo aumentar mi fuerza del alma a través de la artesanía, entonces mi nivel de cultivo también se elevará como el de un cultivador mágico.
Yan Tianhen estaba tan emocionado que no tenía palabras. Ni siquiera preguntó qué tipo de método de cultivo estaba usando Lin Xuanzhi, y luego asintió con todas sus fuerzas y dijo, —Para que Dage vuelva a la normalidad, ¡eso es realmente genial! ¡De ahora en adelante, nadie se atreverá a mirarnos por encima del hombro y a intimidarnos nunca más!
Lin Xuanzhi sonrió y dijo: —Sí.
No sólo eso, un artesano es una existencia adorada por todo el continente Dongzhou.
Las espadas usadas por los espadachines, los hornos usados por los alquimistas y las herramientas mágicas usadas por los cultivadores elementales así como todo tipo de herramientas auxiliares ofensivas y defensivas.
Todo dependía de las manos de un artesano.
Incluso, la calidad de un artefacto podía decidir el verdadero poder de un cultivador. Por eso, nadie se atrevía a subestimar a un maestro artesano genuino.
Son tan importantes que nadie en el Continente Dongzhou menospreciaría a un artesano hábil.
Sin embargo, los buenos artesanos eran tan raros como un fenix. Después de todo, podría considerarse como la era de decaimiento espiritual ahora mismo, así que han pasado varios años desde el nacimiento de un tesoro mágico que podría hacer temblar la tierra y los cielos. Además, la mayoría de las grandes potencias habían muerto después de la antigua Guerra Inmortal-Demoníaca. Incontables tesoros mágicos habían perecido, y debido a que el camino de un artesano es un camino de cultivo auxiliar, el número de artesanos había disminuido rápidamente. Hoy en día, los métodos de cultivo de los artesanos que están por encima del nivel Profundo rara vez se pueden encontrar en el continente Dongzhou.
Como alguien que había renacido, junto con el Espejo del Mundo Revertido que había reparado, Lin Xuanzhi tenía absoluta confianza en convertirse en el artesano número uno.
Después de saber que Lin Xuanzhi ya no tenía ninguna desventaja y ya no estaba condenado a una vida mortal de cien años, Yan Tianhen se sintió tan feliz como si hubiera recogido diez mil piedras espirituales de forma gratuita.
Estaba tan feliz que sin querer barrió toda la comida que había sido cocinada.
Al ver los platos vacíos, Yan Tianhen se limpió la boca con vergüenza.
Su Dage no había tocado la comida en absoluto, y sólo lo miraba comer de principio a fin. En realidad no se dio cuenta de que su Dage no había comido, fue un gran error de su parte.
—Dage, ¿tienes… tienes hambre? —Yan Tianhen se rascó la cabeza y preguntó.
Lin Xuanzhi sonrió, —No tengo hambre, ¿estás lleno?
Yan Tianhen asintió con la cabeza: —Estoy súper lleno.
Lin Xuanzhi preguntó: —¿A qué sabe?
Los ojos de Yan Tianhen se iluminaron mientras elogiaba: —¡Dage, tu cocina es increíble! Obviamente son las mismas verduras, pero ¿cómo las haces tan buenas?
—He…. —Lin Xuanzhi comenzó a reír, y dijo suavemente—, Ya que te gusta, a partir de ahora cocinaré para ti todos los días.
Sin esperar a que Yan Tianhen se recuperara de su shock, Lin Xuanzhi continuó: —Descansa hoy temprano, mañana te sacaré para redimir al cachorro tigre.
—Bien —Yan Tianhen respondió aturdido.
Después de salir de su aturdimiento, se dio cuenta de que Lin Xuanzhi ya había regresado a la habitación principal y cerró sus puertas, incluso los platos de la mesa habían desaparecido.
Yan Tianhen, —….
«¡Esto era demasiado extraño!»
Dentro de la residencia Han, Han Yanran apretó los labios y entró en la habitación de Han Yuran en un ataque de ira.
Han Yuran se preparaba para fabricar un equipo, cuando vio a Han Yanran, frunció sus elegantes cejas y dijo, —Yanran, ¿tienes modales? ¿No dije antes que no se te permite entrar cuando estoy haciendo artesanías?
Traducido por Ji Shenn
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