Xiao Lou, con los ojos brillantes de emoción, se dirigió alegremente al Supervisor He: —¡Supervisor He! ¡El joven maestro me ha recibido y me ha dicho que de ahora en adelante, los días primero y quince de cada mes, debo ir a aprender con él!
El Supervisor He dio un respingo, casi saltando de la sorpresa. Agarró a Xiao Lou con fuerza, preguntando emocionado: —¿En serio? ¿Realmente dijo eso?
—¡Claro que es verdad! Él dijo que con solo decírtelo, tú sabrías qué hacer— respondió Xiao Lou.
El Supervisor He, incapaz de contener su emoción, respiró hondo y miró a Xiao Lou con una expresión indescriptible: —¿Sabes lo que esto significa, muchacho? ¡El joven maestro quiere tomarte como discípulo!
Xiao Lou se quedó pasmado, mirando al Supervisor He con incredulidad.
—¿Cómo… cómo es posible?— Xiao Lou, claramente no había considerado esta posibilidad, balbuceó confundido: —Yo, yo realmente no puedo creerlo. Esto… esto no puede ser real.
El Supervisor He le dio varias palmadas en el hombro, repitiendo: —Bien, bien, bien! Eres un muchacho que da orgullo. ¡Tu madre se pondría feliz si lo supiera! ¡Date prisa, prepárate! Mañana mismo realizarás la ceremonia de discipulado. ¡A partir de entonces, serás el discípulo oficial de nuestro joven maestro!
Xiao Lou se sentía como si estuviera flotando en las nubes, aturdido por la noticia.
¡Un golpe de suerte tan grande había caído directamente sobre su cabeza!
«Jajaja, ¡son noticias excelentes! ¡Si mamá se entera de esto, se pondrá muy contenta y se recuperará de inmediato!»
Fang Yu, por su parte, recibió la noticia como un rayo. Con la boca abierta, miraba fijamente a aquel al que siempre había menospreciado, consumido por una envidia que rayaba en lo enfermizo. ¿Cómo era posible que ese inepto, que entró por la puerta de atrás y no sabía ni lo más básico de ventas, solo por toparse con un artefacto de grado superior, hubiera ganado el favor del joven maestro?
Su mirada se posó en el Supervisor He, que se acariciaba la barba con una expresión de júbilo.
Un pensamiento cruzó su mente: «¡Seguro que el Supervisor He está detrás de esto, ayudando a ese imbécil!»
¡No lo aceptaba! ¡Su corazón ardía en indignación!
Sin embargo, no importaba lo enojado que estuviera y lo mucho que apretara los dientes con odio, no podía cambiar la decisión del Joven Maestro de aceptar a Xiao Lou como discípulo.
Mientras tanto, Lin Xuanzhi, conduciendo su caballo Zhui Ri, llegó a la posada Junlin.
La Posada Junlin era el establecimiento de más alto nivel al pie de la montaña del Secta Xuantian, en la ciudad de Xuan. Incluso la habitación más básica costaba cien piezas de oro por noche, sin mencionar las suites de clase celestial.
Aunque los fondos de Lin Xuanzhi eran limitados, no mostraba la menor preocupación por no poder pagar el alojamiento.
—Tenemos habitaciones de cuatro categorías: Celestial, Profunda, Terrenal y Primaria. ¿Cuál desean?— preguntó un camarero.
Lin Xuanzhi dijo, —Debería haber un joven maestro de apellido Duan que vino con dos tigres blancos.
El camarero inmediatamente desplegó una amplia sonrisa: —¡Ah, son amigos de ese distinguido invitado! Ya ha reservado una habitación para ustedes. Vengan por favor a la Suite Celestial Número Uno.
Yan Tianhen se sobresaltó. Mientras seguían al camarero escaleras arriba, no pudo evitar preguntar en voz baja a Lin Xuanzhi: —Dage, he oído que las habitaciones Celestiales cuestan al menos dos mil piezas de oro por noche. ¿La suite Número Uno debe ser aún más cara, verdad?
El camarero, al oír esto, giró inmediatamente la cabeza y dijo: —¡Así es! Nuestra Suite Celestial Número Uno es la más exclusiva. Además del salón principal, incluye tres dormitorios independientes, todo un conjunto que cuesta tres mil piezas de oro por día.
—¡¿Tres mil piezas de oro?!— Yan Tianhen abrió la boca enormemente, tragando saliva con dificultad mientras miraba a Lin Xuanzhi con incredulidad: —Dage, esta no puede ser la clase de posada que mata y roba a sus huéspedes, ¿verdad?
El camarero resbaló levemente, casi cayéndose.
Lin Xuanzhi no pudo contener una sonrisa: —Aunque el precio parece exorbitante, tiene sus razones.
—¿Qué razones?— preguntó Yan Tianhen, curioso.
—El joven señor debe ser la primera vez que visita Xuan Cheng, ¿verdad?— comentó el camarero, manteniendo una actitud amable.
—Sí— Asintió Yan Tianhen, mientras observaba las lámparas eternas que iluminaban el corredor.
—Eso lo explica todo— dijo el camarero con evidente orgullo. —¿Sabe por qué la Secta Xuantian se estableció en nuestra ciudad Xuan? ¡Porque esta ciudad tiene el qi espiritual más abundante de toda la región oriental! Y nuestra Posada Junlin está construida justo sobre la cola del dragón de esa veta espiritual. Por eso nuestros precios son más elevados que los de posadas comunes. ¡Y la Suite Celestial Número Uno? Especialmente, porque está justo en la punta de esa cola. ¡Un día de cultivación aquí equivale a diez o quince días en otros lugares!
—¡Qué increíble!— Yan Tianhen abrió los ojos como platos. —¿Entonces si alguien se quedara aquí un año entero, podría alcanzar directamente el nivel Amarillo?!
—¡Je, quién sabe!— respondió el camarero, hinchado de orgullo.
Lin Xuanzhi, sin embargo, sonrió y comentó: —Si realmente fuera tan milagroso, el dueño de esta posada ya habría alcanzado la inmortalidad.
El camarero se rascó la cabeza, algo avergonzado: —Bueno… es solo un poco mejor que lugares con qi escaso. El joven Lin, siendo de la Secta Xuantian, sabe que cualquier rincón allí tiene más concentración espiritual que nuestra mejor suite. No hay comparación.
Yan Tianhen miró a Lin Xuanzhi con admiración: —Dage, no sabía que fueras tan famoso. Parece que todos en la ciudad te reconocen.
Lin Xuanzhi sonrió levemente: —Probablemente porque soy bastante atractivo.
—Tiene sentido— asintió Yan Tianhen, tocándose la cara. —Entonces, cuando vuelva, seguro todos me reconocerán también. ¡El joven maestro del Pabellón de Artefactos dijo que tengo excelente presencia!
—Sin duda— concordó Lin Xuanzhi con solemnidad.
El pobre camarero estuvo a punto de caerse de trasero.
«¡Este Lin Xuanzhi no es nada como me lo imaginaba!»
«¡Y este feo idiota que tiene la cara cubierta de tantas cicatrices que ni siquiera se distingue su aspecto real!… ¿no tiene conciencia de sí mismo en absoluto?»
Con el corazón en un puño, el camarero llevó a los dos “dioses” hasta la puerta de la Suite Celestial Número Uno y huyó como si le persiguiera el demonio.
Al abrir la puerta, A-Bai y Hu Po se lanzaron hacia Yan Tianhen con ansiedad.
A-Bai se lanzó al abrazo de Yan Tianhen y aullando lastimeramente. como si estuviera quejándose, pero también como si tratara de actuar de forma linda.
Yan Tianhen, confundido, lo abrazó y le dio un beso en la frente: —¿Qué te pasa?
Duan Yuyang emergió de uno de los dormitorios con el pelo revuelto y la ropa desaliñada, como si hubiera sido brutalmente maltratado. Con el rostro oscuro, gritó: —¡Estos dos “leales” demonios que criaste, incapaces de distinguir el bien del mal, al no verlos por un rato pensaron que los habían vendido y se dedicaron a torturarme! Por suerte, este joven maestro tiene buen temperamento y no quise pelearme con ellos… ¡Si no, ya estarías viendo dos tazones de sopa de tigre!
A Bai: “¡Auuuuu!”
Hu Po se agachó, emitiendo un gruñido de advertencia hacia Duan Yuyang.
Duan Yuyang puso los ojos en blanco: —No pierdo mi tiempo con dos cachorros malcriados.
Yan Tianhen, sonriente, colocó a A-Bai en el suelo. Miró alrededor de la habitación, saltó alegremente sobre un cojín de meditación que parecía suave. A Bai, moviendo la cola, siguió a Yan Tianhen por toda la suite como un torbellino peludo.
Duan Yuyang se masajeó las sienes y preguntó a Lin Xuanzhi: —¿Por cuánto lo vendieron?
Yan Tianhen, emocionado, gritó: —¡No conseguimos dinero! ¡Lalalá, ni un céntimo!
—¿Qué dices?— Duan Yuyang se sobresaltó y miró a Lin Xuanzhi buscando confirmación.
—Es cierto, no obtuvimos dinero— confirmó Lin Xuanzhi.
—¡Carajo!— Duan Yuyang casi saltó del susto —¿Y de qué diablos te alegras entonces? Oye, Lin Xuanzhi, ¿no te habrán estafado?
—No precisamente. Lo intercambié por otra cosa— dijo Lin Xuanzhi, sacando el pincel de forja de madera de tung divina y entregándoselo a Duan Yuyang —Fue un trueque, pero el objeto sigue perteneciendo técnicamente a su dueño original.
—Malparido…— Duan Yuyang palpó el pincel de forja, tragándose las palabras “¿acaso eres idiota?” Tras examinarlo detenidamente, alzó la vista con mirada compleja—: …¡Eres un viejo zorro!
Lin Xuanzhi esbozó una leve sonrisa: —No lo llamaría astucia. Solo conseguí algunas… ventajas adicionales del joven maestro.
—¿Qué ventajas?— Duan Yuyang se inclinó hacia adelante, los ojos brillando de curiosidad.
—Piedras de refinamiento— respondió Lin Xuanzhi. —Y una oportunidad de colaboración a largo plazo.
—¡Obvio! Con tus habilidades, ellos son los que salen ganando— Duan Yuyang parpadeó curiosamente. —¿Cuántas piedras te dieron?
Lin Xuanzhi alzó un dedo, balanceándolo lentamente.
—¿Cien?— preguntó Duan Yuyang. —¿De qué grado?
—Medio.
Duan Yuyang hizo cálculos mentales. —No está mal— Cien piedras de refinamiento de grado medio equivalían a mil piezas de oro.
—Por mes— añadió Lin Xuanzhi.
Duan Yuyang tragó saliva. Miró a Yan Tianhen, quien estaba siendo acosado por los dos tigres, y bajó la voz: —¿Esto significa que… planeas regresar?
—Correcto.
Una mezcla de emociones cruzó el rostro de Duan Yuyang. —Creí que jamás volverías a la Secta Xuantian.
Después de todo, Lin Xuanzhi había sido descartado por la secta. Con su orgullo, parecía imposible que regresara al lugar que lo humilló.
Pero una vez más, Lin Xuanzhi lo sorprendía.
Siguiendo su mirada hacia Yan Tianhen, cuyos ojos brillaban mientras jugaba con las bestias, Lin Xuanzhi dijo con suavidad:
—A-Heng necesita un maestro. Y la Secta Xuantian es el mejor lugar para él.
—¿Tú no podrías enseñarle?— Duan Yuyang frunció el ceño. —Aunque ya no sigas el Camino de la Espada, estás más que cualificado para guiar a Tianhen.
—Solo un maestro excepcional puede formar a un discípulo sobresaliente— dijo Lin Xuanzhi, negando lentamente con la cabeza. —Mi padre nunca tuvo el corazón para ser estricto con A-Heng, y yo tampoco. Por eso no soy apto para enseñarle. Solo lo retrasaría… No puedo fallarle de esa manera.
Duan Yuyang lo miró y asintió con comprensión: —Lo noté. Antes lo tratabas como si no fuera humano, y ahora actúas como si él fuera el único ser humano que existe.
Lin Xuanzhi, —…..
—Este cambio tuyo es realmente un poco aterrador— añadió Duan Yuyang con una sonrisa burlona.
Lin Xuanzhi dejó pasar el comentario y cambió de tema: —¿Cuándo planeas ver al papá de Yuan Tianwen?
Los ojos de Duan Yuyang perdieron brillo. Se encogió de hombros con falsa indiferencia: —¿Para qué? Están disfrutando felizmente de su reunión familiar ahora mismo. ¿Qué papel tengo yo ahí? Solo vine a despejarme, no a buscar al tío Su.
Lin Xuanzhi dijo: —Pero, ¿estás dispuesto a entregarlo en bandeja de plata así como así?
Duan Yuyang soltó una risa amarga: —Si él no siente nada por mí, si ya me rechazó dos veces… ¿Para qué humillarme otra vez? No soy tan patético.
Había orgullo en sus palabras. Aunque al principio la situación con Yuan Tianwen y Han Yuran lo había consumido de rabia, estos días de viaje habían disipado su amargura.
Duan Yuyang siempre había sido alguien que valoraba su libertad. Nunca se permitiría quedar atrapado en un callejón sin salida.
Lin Xuanzhi asintió: —Tal vez sea lo mejor. Yuan Tianwen nunca tuvo buen ojo para juzgar a las personas.
Duan Yuyang soltó una carcajada: —¡Debe estar loco! ¿Cómo pudo fijarse en alguien tan falso como Han Yu Ran? Tú, en cambio, tienes buen criterio: no solo pateaste a ese hipócrita, ¡encima conseguiste un “esposo de crianza”!
Lin Xuanzhi parpadeó, desconcertado: —¿Esposo de crianza?— luego se rió, corrigiendo: —Es mi Didi.
—No lo parece— Duan Yuyang negó rotundamente
Lin Xuanzhi encogió los hombros: —Sigue mirando entonces.
Duan Yuyang volvió a observar la forma en que Lin Xuanzhi miraba a Yan Tianhen y no pudo evitar pensar para sus adentros: «Esa mirada llena de ternura… ¿qué clase de hermano mira así a su hermano menor?»
«Por ejemplo, cuando veo a mi propio hermano, lo único que siento son ganas de darle una buena bofetada…»
Notas
Diferencia en el Nivel primario y amarillo
Jerarquía de Niveles de Cultivación (común en xianxia):
Nivel Primario / Xuán Jiē (玄阶)
Base del camino de cultivación.
Nivel Amarillo / Huáng Jiē (黄阶)
Siguiente escalón después del primario (玄阶 → 黄阶 → 地阶 → 天阶…).
En muchas obras, el nivel Amarillo es superior al primario (玄阶).
Ejemplo del texto traducido:
Cuando Yan Tianhen pregunta si alguien podría “llegar al nivel Amarillo” tras un año en la suite, implica que es un avance significativo desde niveles básicos.
Traducido por Ji Shenn
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