« Capítulo 18: Alzando la Voz Contra la Injusticia »

Traducido por:

Publicado el:

Estado de Edición:

Editado

Editor/es responsable/s:

13 minutos
📝 Tamaño de fuente:

Era inevitable. Una vez que lograron captar la atención de toda la nación, los rumores sobre el grupo volvieron a surgir con fuerza, especialmente alrededor de Fang Juexia, quien parecía estar destinado a atraer controversias. Sin embargo, a diferencia de antes, esta vez recibió más apoyo y defensas por parte de sus fans. Por primera vez, los Weibos aclaratorios y las publicaciones de apoyo superaron en número a las de los detractores. Aun así, algunos haters seguían acusándolo de “tener una tendencia natural a torturar a sus fans”.

En el centro del torbellino mediático, Fang Juexia no tenía tiempo ni ánimo para preocuparse por esas cosas. Después del incidente en la transmisión en vivo, la cantidad de actividades comerciales para Kaleido aumentó drásticamente. Marcas y programas de entretenimiento no tardaron en ofrecer colaboraciones. Su lista de pendientes superaba con creces cualquier interés en poner atención a la opinión pública en línea.

Mientras que los demás integrantes continuaban con sus propios compromisos individuales, Fang Juexia tenía asignado un nuevo proyecto: una sesión de fotos para la portada de una revista junto a Pei Tingsong. Sería su primera incursión en el mundo de la moda y, además, para una de las cinco revistas más prestigiosas. Un buen desempeño podría abrirle las puertas de este exclusivo círculo, pero un mal resultado sería como un despegue fallido que terminaría en un desastre.

A las 5:30 de la madrugada, Cheng Qiang llegó al dormitorio para despertar a Fang Juexia y Pei Tingsong. El frío era cada vez más intenso, y una nueva nevada había caído durante la noche.

Pei Tingsong tenía un humor terrible al despertar, y ni siquiera cuando llegaron a la sala de vestuario logró cambiar su actitud. Con el ceño fruncido, se veía incapaz de pretender ser el idol amable y profesional. Parecía un demonio salido del inframundo, asignado a castigar a otros pero con una carga de trabajo excesiva. Fang Juexia no pudo evitar pensar en esta comparación tan peculiar mientras lo observaba.

“¡Morning~!” La puerta se abrió de golpe, dejando entrar a un hombre alto y corpulento que llevaba un llamativo abrigo de plumas color rosa neón. Su voz ronca tenía un tono agudo forzado:

“¡Hola~! Soy el director de estilo de hoy, pueden llamarme Andy”.

Sus uñas largas estaban decoradas con destellos y pequeños cristales.

“Hola”, respondió Fang Juexia con una sonrisa cortés.

“¿Estás sin maquillaje, cariño?” Andy hablaba con un estilo tan exagerado que parecía una actriz de teatro musical. Se acercó de repente, haciendo que Fang Juexia inclinara instintivamente la cabeza hacia atrás.

“¡Wow! ¡Eres el artista masculino con la piel más blanca y perfecta con el que he trabajado! Muchos artistas adoran hacerse pasar por los de ‘piel blanca fría’, pero en realidad necesitan aplicarse tres capas de base en privado para lograrlo.”

Mientras hablaba, sus ojos se posaron en la marca de nacimiento junto al ojo de Fang Juexia. Extendió la mano con la intención de tocarla.

“¡Oh, siempre he tenido mucha curiosidad! Esa manchita en tu rostro…”

“Deja de tener curiosidad, en serio.”

La mano de Andy fue detenida por Pei Tingsong, quien la apartó suavemente del rostro de Fang Juexia. Su expresión era una mezcla de sonrisa fingida y advertencia.

“Andy-ge, ¿no deberías estar buscando ropa para nosotros ahora?”

Andy, al ver a Pei Tingsong, adoptó de repente una expresión un poco coqueta y le dio unas palmaditas ligeras en la manga.

“¡Ay, sí, sí, buscar ropa! Con lo alto que eres, deberías ser modelo.”

Pei Tingsong no estaba acostumbrado a que lo llamaran de esa manera. Al instante se le puso la piel de gallina y soltó la mano de Andy de inmediato. Andy, por su parte, se quitó el abrigo, revelando un jersey negro ligeramente ajustado, y comenzó a abanicarse con la mano.

“Coco, saca el plan de diseño de estilo.”

Fang Juexia no tenía una opinión particularmente buena ni mala sobre Andy. Durante los días más difíciles de su carrera, se había acostumbrado a recibir miradas condescendientes de parte del personal. Muchas veces, el maquillaje que le aplicaban lo hacía lucir peor que cuando no lo llevaba.

En el mundo del entretenimiento, los idols dependían mucho de sus estilistas. A diferencia de otros artistas, su apariencia y estilo eran elementos cruciales de su carrera, y los estilistas ocupaban una posición muy alta en este pequeño círculo. Andy tenía un gran renombre, pero no mostraba aires de superioridad, lo cual ya era una ventaja.

Juexia echó un vistazo a Pei Tingsong, notando que su reacción ante Andy era mucho más evidente.

Definitivamente no es gay, pensó Fang Juexia.

Coco, la asistente de estilo encargada de repartir los materiales, era una chica que hablaba muy rápido.

“¡Ya casi es primavera! Así que la revista decidió ir con el concepto de ‘Primavera en Floración’. Como el estudio de fotografía está ubicado en un invernadero, el estilo combinará elementos de flores y plantas, integrándose con los paisajes naturales.”

En ese momento, también entró Xiao Zhou, el asistente del fotógrafo encargado de coordinar el maquillaje con el equipo de estilismo. Tras discutir brevemente con Andy, confirmaron nuevamente el diseño del maquillaje.

Fang Juexia hojeó el plan. Había bocetos abstractos de diseño y propuestas de combinaciones de colores. Se veía bien, pero él, con su excelente memoria, no pudo evitar recordar que el personaje que había hecho famoso al actor que lo había reemplazado en el trabajo anterior también era un florista.

Al revisar más páginas, encontró que el concepto y el estilo general del plan derivaban claramente del tema de un florista. Las partes relacionadas con la primavera parecían haber sido añadidas después, lo que le daba al proyecto un aire improvisado y poco original.

Sin embargo, Fang Juexia tenía claras sus prioridades. Dada su experiencia en la industria, no estaba en posición de exigir demasiado. Si se tratara de un trabajo en el escenario, sería inflexible con cualquier detalle, incapaz de tolerar siquiera un defecto menor en su micrófono de diadema. Pero con otros tipos de trabajo, como este, no tenía tanto entusiasmo y, por ende, no veía razón para luchar por algo que realmente no le interesaba.

El asistente del fotógrafo también intervino para apoyar la discusión:

“Así es, la revista considera que ambos encajan perfectamente en el concepto de primavera, con una imagen fresca y juvenil. El estilo de ‘chicos mejores que las flor’ nunca pasa de moda, y considerando la gran atención que han generado recientemente como dúo, pensamos aprovechar esa química para un concepto de ‘gemelos’.”

Al parecer, querían tomar el camino más fácil y simplemente reutilizar el concepto que originalmente había sido diseñado para el actor en su papel de florista. Fang Juexia cerró el plan de diseño, un poco preocupado de que el maquillaje floral pudiera hacerlo lucir demasiado femenino o recargado.

“Por eso, vamos a destacar los puntos en común entre ambos en el maquillaje…”

“Disculpen.” Una voz interrumpió al asistente.

Fang Juexia giró la cabeza y vio que Pei Tingsong había levantado la mano con calma.

“¿Puedo participar en la discusión?”

Que un artista interviniera en el proceso creativo no era algo fuera de lo común; el equipo de producción estaba acostumbrado a lidiar con todo tipo de peticiones, incluso las más inusuales. Por eso, el asistente del fotógrafo mostró una breve expresión de sorpresa antes de responder con cortesía:

“Claro, adelante.”

Sin embargo, Fang Juexia conocía demasiado bien a Pei Tingsong. Sabía que no se trataba simplemente de querer participar; cuando este hablaba, siempre tenía algo más en mente. Y desde hacía un rato, su expresión había mostrado signos de molestia.

“Entonces, seré directo. Este plan es bueno” dijo Pei Tingsong mientras se acomodaba en el sofá y levantaba la mirada con una sonrisa, “pero no encaja para nada con Juexia-ge.”

Fang Juexia estaba atónito.

“Además, entre él y yo no hay ninguna semejanza. Usar un concepto de ‘gemelos’ sería forzarlo demasiado.”

Aunque las palabras no fueron especialmente agresivas, el ambiente en la sala se tornó tenso de inmediato. Las expresiones de los presentes eran diversas. Incluso Cheng Qiang, quien había estado revisando los apuntes para la entrevista, sintió la incomodidad en el aire. Levantó la cabeza y, tras evaluar la situación, se apresuró a suavizar las cosas con una sonrisa:

“Así es nuestro Xiao Pei, directo y franco por haberse criado en el extranjero. Tomen sus comentarios como una opinión, no hace falta seguirlos al pie de la letra.”

Justo en ese momento, la puerta se abrió nuevamente, dando paso al fotógrafo Lin Mo, quien había llegado tarde. Su presencia era imponente debido a su prestigio en la industria. Era conocido por su habilidad para resaltar y magnificar las cualidades únicas de cualquier modelo, convirtiendo incluso a las personas más comunes en protagonistas de sesiones fotográficas visualmente impactantes.

El mayor inconveniente era que este fotógrafo, Lin Mo, tenía un carácter peculiar, era difícil trabajar con él, y solo aceptaba trabajos si le agradaba la idea. Haber logrado que accediera a esta sesión fue pura suerte: una gran estrella internacional había cancelado su sesión debido a problemas de agenda, y así lograron colarse en su hueco libre.

“¿Xiao Zhou? ¿Ya prepararon las luces?”, preguntó con un tono algo cortante mientras echaba un vistazo general a la sala. “¿Qué está pasando?”

El asistente, Xiao Zhou, dejó escapar una risa incómoda. “Ah, nada, nada. Iré a buscar al técnico de iluminación de inmediato.”

“Sí hay algo.” La voz de Pei Tingsong interrumpió con calma, pero sin ceder. Miró directamente a Lin Mo. “Maestro Lin, revisé el plan que elaboró su asistente. Honestamente, no parece que sea de su estilo.”

Para Lin Mo, este trabajo no era más que un relleno en su agenda. Había accedido a que su asistente se encargara de la planificación como una especie de recomendación personal, además de que tenía sus propios prejuicios hacia la profesión de idol.

En su opinión, los rostros atractivos carecían de historia; las imágenes resultantes no contaban nada, no tenían alma. Además, estos rostros bonitos solían pedir cosas como “haz que me vea más guapo”, lo que anulaba el propósito artístico de su labor.

Esa era también la perspectiva que inicialmente tenía de los dos integrantes del grupo masculino que habían ganado tanto auge recientemente. Escuchar a Pei Tingsong criticar el plan solo reforzó sus prejuicios. Lin Mo dejó escapar una leve risa, volteando a mirar a Fang Juexia, quien permanecía impasible. “¿Tú también lo piensas?”

Con solo una mirada, Lin Mo concluyó que Fang Juexia se parecía más a una muñeca impecablemente elaborada que a un ser humano.

Fang Juexia siempre había sido reservado en sus expresiones.

Sin embargo, había desarrollado una extraña conexión con Pei Tingsong. Como cuando este interrumpió al asistente momentos atrás: Fang Juexia entendió de inmediato el significado detrás de “no encaja”. Originalmente, estaba dispuesto a ceder, como lo había hecho en tantas ocasiones anteriores, porque consideraba que estos detalles no eran importantes. La indiferencia era mutua.

Pero Pei Tingsong no era así. Él no estaba dispuesto a inclinar la cabeza. Siempre debía levantar la cortina de conformidad tácita, aunque fuera incómodo.

Como compañero de debut, Fang Juexia no disfrutaba de este tipo de valentía aislada. Sin embargo, esta vez eligió expresarse e incluso Cheng Qiang se mostró sorprendido.

“Lo que dijo Xiao Pei sobre la falta de idoneidad no es una crítica al plan. El concepto es bueno, y realmente encaja con Pei Tingsong.” Fang Juexia mantuvo una sonrisa educada. “Pero… si el objetivo es seguir las tendencias actuales y simplificarnos hasta hacernos iguales, quizá no sea la mejor estrategia. Somos muy diferentes.”

Lin Mo asintió lentamente, evaluando a los dos jóvenes con miradas repetitivas, antes de tomar el plan de la mesa y hojearlo casualmente.

“Desde que vi este plan, supe que no era suyo,” dijo Pei Tingsong sin rodeos. “Después de todo, usted es el fotógrafo menos afín a las sesiones en masa.”

Al escuchar esto, Cheng Qiang se puso nervioso. Esto equivalía a desacreditar abiertamente el trabajo del asistente de Lin Mo. Abrió la boca para intervenir, pero Fang Juexia, de pie a su lado, le tocó el brazo suavemente, pidiéndole que no interviniera.

Lin Mo detuvo sus movimientos, levantó la mirada y entrecerró los ojos para examinar a Pei Tingsong antes de levantarse y caminar lentamente hacia él.

La atmósfera se volvió tensa, tan fría que incluso Andy, siempre animado, no se atrevió a respirar.

Cuando Lin Mo llegó frente a Pei Tingsong, finalmente habló. “Eres audaz, ¿eh?”

Fang Juexia exhaló aliviado en silencio.

“Xiao Zhou,” dijo Lin Mo, girándose, “¿te parece que este trabajo lo hago de forma superficial como tú hiciste este plan?”

Sus palabras fueron astutas, dejando claro que el problema era del asistente y no suyo, mientras enfatizaba su compromiso profesional.

Xiao Zhou, cabizbajo, asintió repetidamente. Su jefe tenía fama de ser severo, y aunque hoy solo lo reprendió ligeramente, consideraba un alivio que no le gritara. De hecho, Xiao Zhou había sido negligente: sabía que el concepto rechazado por el equipo anterior aún estaba disponible, así que lo había reciclado.

Lin Mo se inclinó hacia Pei Tingsong y, en un tono que solo ellos dos podían escuchar, le preguntó: “Esta sesión también habría quedado genial contigo, ¿por qué te involucraste?”

“¿No es una sesión doble?”, respondió Pei Tingsong arqueando una ceja.

Lin Mo sonrió y asintió. “Definitivamente eres como dijo tu hermana.”

Pei Tingsong también sonrió. “Seguramente no fue nada bueno.”

“Xiao Zhou,” ordenó Lin Mo con rapidez, “reformula el plan. El concepto de primavera solo se aplicará a la sesión de Pei Tingsong.” Xiao Zhou, apresurado, respondió afirmativamente mientras abría su computadora.

Lin Mo se acercó a Fang Juexia, observándolo detenidamente, y con una lentitud deliberada añadió: “No haremos primavera. Sus rasgos son demasiado refinados, un exceso de flores opacaría su carácter y lo haría parecer común.”

Se detuvo y preguntó: “¿Tienes alguna idea?”

Fang Juexia, más callado que cualquier otro artista, pareció inmutable ante la pregunta.

“Invierno.”

Los ojos de Lin Mo mostraron un destello de sorpresa. “¿Por qué?”

Fang Juexia recordó algo. Sus labios, usualmente tensos, se curvaron levemente en una sonrisa distinta de las de cortesía, como si esta naciera de lo más profundo de su ser.

“Alguien dijo que parezco hielo.”

★☆★ ♪ ★☆★ ~●~★☆★ ♪ ★☆★

Notas del Autor:

Hoy es día de Pei Tingsong · defendiendo al hermano mayor · el que no puede dejar de ser real.


Donar con Paypal

🌸 El contenido de Pabellón Literario está protegido para cuidar el trabajo de nuestras traductoras. ¡Gracias por tu comprensión! 💖