Capítulo 19- Delante de los niños.

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Kim Sunghan, de nuevo fue el conductor y nos siguió. Esto fue porque Yerim obviamente no tenía una licencia para conducir y yo tampoco tenía una. Para ser precisos, en este período de tiempo no la tenía, saqué la licencia de conducir y compré un coche cuando me convertí en un cazador de alguna manera, a pesar de ser de clase F.

Mi bebé aún no había nacido ¿debería de comprar el mismo tipo de coche esta vez también?

En cuanto llegamos a la entrada del apartamento, Yerim tenía un aspecto nervioso. Bueno, todavía era sólo una joven de quince años. Aunque la relación fuera mala, cortar con los familiares adultos que te cuidaban no sería algo cómodo.

Aun así, tal vez gracias a la estadística mental de clase S, pulsó el botón del ascensor sin vacilar, tampoco dudó en seleccionar el piso.

Parecía que no había mucho de qué preocuparse.

—Es aquí —dijo Yerim.

Bajamos en el piso 14, dio la vuelta tras dirigirse a la puerta derecha.

—Incluso si ese tío tuyo se vuelve desagradable, absolutamente no puedes tratar con él, se vuelve complicado si un despertado de alto rango toca a una persona normal, así que a pesar de que te enojes debes de aguantarte.

Pero como yo era de clase F, alguien que no era muy diferente a una persona normal estaría bien. Yerim parecía estar descontenta, pero asintió con la cabeza.

Tras una última inspección, me puse delante de ella y llamé al timbre; Al poco tiempo, se oyó la voz de una mujer de mediana edad que preguntaba quién era.

—Soy el nuevo tutor de Park Yerim-yang.

—¿Qué es eso? —por el intercomunicador, se escuchó un murmullo.

Bueno, debía de ser inquietante. Poco después la puerta se abrió.

Un hombre corpulento de unos cincuenta años, que llevaba unos pantalones cortos holgados y un traje de correr, me miró con el ceño fruncido.

—Es la primera vez que nos encontramos, usted debe de ser el anterior tutor de Park Yerim-yang ¿verdad?

Lo salude con una sonrisa y una amable voz. El hombre, que era el tío de Yerim, Park Sungtae vio a Yerim de pie un poco más atrás y frunció aún más el ceño.

—¡Qué ha hecho esa mocosa!

Me picaron los oídos a causa del repentino grito, pero qué voz tan bonita.

—Deberías calmarte.

—¡Calmarme! ¡qué calmarme ni que nada! ¿de dónde demonios has salido cabrón?

—Lo dije antes, soy el nuevo tutor de Park Yerim-yang.

—¿Tutor?

Al escuchar la palabra “tutor”, Park Sungtae se detuvo. Probablemente, estaba pensado en la herencia de su hyung que le había arrebatado a su sobrina.

—Yo soy el tutor de esa niña. Tutor, que tutor ¡Tratando de estafar a alguien!

—No es ninguna estafa, por favor echa un vistazo.

Saqué el contrato de tutor para menores despertados de la bolsa de documentos preparada a propósito y se lo pasé amablemente. Lo hice rellenar y autentificar oficialmente cuando fuimos al departamento jurídico.

Yerim aún no se había registrado en la Asociación, pero se había medido con los instrumentos de medición del Gremio Haeyeon, y estaba garantizado como persona despierta e incluso fue contratada como cazador, así que legalmente no había ningún problema.

Tienes que hacer estas cosas correctamente.

—… ¿persona despierta? ¿esa mocosa?

Lo que apareció en la cara del hombre que escudriño el contrato no fue otra cosa que codicia. Era bueno que fuera fácil de entender.

Miro fijamente a Yerim.

—Persona despierta, he oído que gana mucho dinero.

—Difiere según la clase, sin embargo, eso no es lo importante. Los cazadores menores tienen los mismos derechos que los adultos, así que pueden elegir ellos mismos a sus tutores, en otras palabras, Park Sungtae-ssi, ya no tiene ninguna responsabilidad ni derecho como su tutor.

Park Sungtae no entendió de inmediato y frunció el ceño.

—¿De qué estás hablando? Yo soy su tutor.

—Ya no.

Entiéndelo de una vez, ¿Cuántas veces tengo que explicarlo?

—¡Qué tontería es esa! ¡Esa mocosa tiene dieciséis años!

—Tiene quince y según la ley especial de cazadores, uno tiene los mismos derechos que un cazador adulto a partir de los catorce años y como el cumpleaños de Park Yerim-yang ya ha pasado, tiene 15 años.

—Ley especial, ¿qué tontería es esa? ¡De todas formas deja de balbucear tonterías y lárgate! ¡Yerim, ven aquí!

Me empujó y trató de acercarse a Yerim. Pero no me moví ni un centímetro.

Sabía que esto iba a pasar y vine con los guantes de cuero, aunque hiciera calor. Si vas a venir a mí, entonces vamos, ¡ahora tengo 24 de fuerza! 

—Este bastardo…

Cuando yo, que era relativamente más pequeño, no fui empujado ni un poco, Park Sungtae se sorprendió y retrocedió. Bloqueé la puerta que se estaba cerrando sola con mi pie, y bajé el tope de la puerta.

—¿Cómo pudiste golpear a alguien de repente? Por favor, habla bien.

—¿Golpear? ¿Quién golpeó a quien, imbécil? ¡Así que tú también eres un despertado! ¿no sabes que los despertados no pueden pegarle a la gente común?

—Efectivamente soy una persona despierta, pero soy de clase F, sin mucha diferencia con una persona normal y no tengo intención de usar nada parecido a la violencia. Además, fue Park Sungtae-ssi quien me golpeo primero

Ahora, en este momento, yo era un pacifista que enfatiza la ética y la moral. Mira mi sonrisa virtuosa. ¿No parezco bondadoso?

—Ya que he dicho esto, confío en que entiendas, que soy yo el tutor de Park Yerim-Yang y tú no.

Dije retirando el contrato que Park Sungtae tenía en la mano.

Luego, saqué los documentos relacionados con la herencia de Yerim.

—Cuando lo comprobé, parece que has vendido todos los bienes inmuebles de la herencia que deberían ser de Park Yering-yang, por lo que deben de ser regresados.

Cuando se habló de la herencia, el semblante de Park Sungtae, se volvió vicioso.

—eso es porque…. Es complicado de muchas maneras y ¡Yerim estuvo de acuerdo!

Balbuceaba bien con esa boca suelta.

—Eso debería de ser cuando tuviera quince años, y no cuando tuviera trece y fuera solo una estudiante de primaria.

—En cualquier caso, fue un acuerdo y ella accedió. —dijo el tipo descaradamente, era un poco irritante.

—No me convence, pero hoy no estamos aquí para tratar con lo relacionado a la herencia, así que volveré al tema.

Guardé los documentos de la herencia a los que Park Sungtae ni siquiera echó un vistazo, y esta vez tendí un memorando.

 —Este es un memorando, dice que: a partir de ahora, no te acercaras ni contactarás a Park Yerim-yang en absoluto ¿lo firmaras?

Probablemente no tendría un efecto legal, pero sería suficiente para manejar los medios de comunicación. Park Sungtae frunció el ceño y escupió una maldición.

—¡La eduque sinceramente y ahora que se ha convertido en una persona despierta intentas llevártela! ¡Este cabrón hijo de puta!

El memorándum cayó al suelo al ser apartado de un manotazo, detrás de mí, escuche el sonido de un rechinar de dientes.

Sopórtalo un poco más Yerim.

—Pareces ser un tutor muy serio, al menos de palabras, ya que la niña a la que has educado tan sinceramente va por ahí con unos zapatos desgastados que ni siquiera le sirven o son de su talla.

Hablé, demostrando que estaba conteniendo mi ira, en realidad, me estaba comenzando a enfadar poco a poco, así que no necesitaba exteriorizarlo deliberadamente.

—¡Eso es por qué! Mientras criábamos a los niños pobremente, la dejamos que usará algunas cosas heredadas como los zapatos…

—Así que hoy en día hay circunstancias de pobreza en la que te embolsas varios miles de millones en herencia y no puedes ni comprar un par de zapatos ¿el precio subió mucho cuando no estabas poniendo atención?

Los zapatos nuevos parecían constar cien millones por par ¿he venido al futuro en vez del pasado?

Ante mi sarcasmo, la cara de Park Sungtae se sonrojó.

—De cualquier forma, si es que tienes conciencia deberías de pagarme por el tiempo en que la crie ¿es correcto decir que te vayas diciendo que vivirás bien por ti mismo?

Vaya, míralo haciendo demandas irrazonables. El grosor de su cara debe ser de un metro.

Deliberadamente suspiré profundamente, después saqué mi cartera.

—Al final pon algo de dinero, eso es lo que estás diciendo.

—No, no es exactamente eso…

—Este es un cheque por cien millones.

En cuanto mostré el cheque, los ojos de ese tipo parpadearon observando de arriba abajo.

—Eso es bastante, con esa pequeña suma…

—Esta pequeña suma, por favor recuerda que no tengo ninguna razón para dártela en primer lugar, es solo que es mi inversión para mi protegido.

Park Sungtae, que estaba dudando, recogió el memorándum que había caído al suelo. Lo más probable es que su situación financiera no sea buena. Sólo con revisar brevemente la copia de su registro, pude ver que tenía una hipoteca en unidades de cien millones.

Después de coger varios miles de millones y acabar así varios años después, esos cien millones que tenía delante de sus ojos debían ser escasos.

—…dame un bolígrafo.

—Aquí tienes.

Firmamos el memorándum y cada uno tomó una copia.

—Entonces, espero que no haya otra razón para encontrarnos de nuevo.

Tras decir esto, apague el dispositivo de grabación, con solo la conversación en la grabadora, era suficiente para sentir que había agachado la cabeza y dado dinero a un sinvergüenza.

El hecho de que se embolsó la herencia quedó grabado, que no fue bueno con Yerim y que se quedó con el dinero, quedó grabado. Además, en todo momento fui educado.

Fue perfecto.

—¿Qué fue lo de hace un momento?

Al verme apagar la grabadora, Park Sungtae frunció el ceño.

¿Cómo que qué?

—Es una grabación que usaré para enterrarte y tirar cualquier basura.

—… ¿Qué?

—No hay forma de que un bastardo como tú cierre la boca con sólo cien millones ¿verdad?

—¡Bastardo loco!

¡Bam!

Empujé mi palma a la cara del tipo que de nuevo se abalanzaba sobre mí y lo estrellé contra el marco de la puerta, mientras pateaba el cuerpo que caía dentro de la casa.

—¡Papá de Soochun!

Una mujer de mediana edad que se asomaba desde la puerta interior gritó con voz estridente.

—No quiero deshacerme de los cadáveres así que, por favor, cállate. ¿No es una molestia para el vecindario?

Tal vez la vecina de al lado había salido el fin de semana porque estaba tranquilo, pero por si acaso. 

La mujer de mediana edad tembló y automáticamente asintió con la cabeza.

Iba a terminar con una advertencia, pero estaba tan asustada que me dio un poco de vergüenza.

Me agaché y golpeé la mejilla de Park Sungtae. 

Puede que le haya herido la cabeza porque había un ligero olor a sangre. El tipo gruñó y abrió los ojos.

—Deberías de tener cuidado, ¿qué harías si tu pie resbala? Si te golpeas mal la cabeza, morirás enseguida.

—Qué, qué…

—La entrada del apartamento es de metal por lo que es peligroso de varias maneras. Como puedes ver aquí.

Tiré del brazo del hombre caído y le hice poner los dedos en el marco de la puerta. Pisé ligeramente la mano que se retorcía intentando retirarse.

—¿Si cierras mal la puerta, no se podrían cortar? Sería un desafortunado accidente.

—¡Espera un momento! ¡Me equivoque! Incluso te devolveré el dinero.

Los ojos que me miraban estaban llenos de miedo. 

Todavía era una persona normal, así que ¿me pasé un poco? Incluso hace un rato, debo haber parecido un bastardo medio loco, hmm.

Eso no va a servir. Tengo que vivir bien esta vez.

Me enderecé y sonreí ampliamente.

—¡Ah, me disculpo! Fui demasiado duro ¿verdad? No te molestaré más así que no te preocupes, lo mismo en el futuro siempre y cuando no molestes. En definitiva, no habrá ninguna razón para que nos encontremos, así que vive bien de esa forma.

Cien millones aparecieron inesperadamente, qué grande es eso.

—Pero si te pones codicioso, no me detendré en una advertencia, haré publica la grabación, le daré algo de dinero a la prensa para condenarte al ostracismo y luego te forzaré para que devuelvas la herencia que te has embolsado, ¡oh claro! Es posible que te falte dinero, en ese caso más o menos te obligaré a despertar y te entregaré para que trabajes como portero de mazmorras ¿sabes? Si mueres en una mazmorra, nadie sabrá lo que ha pasado.

Cuando se limpiaba una mazmorra, al reiniciarse, los cadáveres también desaparecían. Si se fingía que los habían matado los monstruos, se solucionaba limpiamente.

Uf, otro recuerdo desagradable estaba a punto de aflorar. Se convirtieron en cosas que no sucedieron, así que olvidemos rápidamente.

—¡Viviré tranquilamente! ¡Me mantendré en silencio!

—Si haces eso, entonces gracias. Ahora, por favor, levántate. Deja de agachar la cabeza, solo provocas que alguien se avergüence.

Considerándolo más o menos terminado, me volví hacia Yerim, pero la chica me miraba de una forma extraña.

…puede que fuera demasiado excesivo, después de todo seguía siendo el tío con el que vivía y que yo había herido en la cabeza, además de amenazarlo con cortarle los dedos, por lo que debería de ser suficiente para que me mirara de forma extraña. No sería bueno que nuestra relación se rompiera.

—Oye, Yerim.

—Ahjussi ¿estás bien?

—… ¿eh?

Yerim habló mientras caminaba hacia mí.

—¿No estás herido en ninguna parte?

…creo que te has equivocado de persona Yerim.

Era yo quien estaba golpeando a alguien, así que ¿qué estás diciendo?

 

♦◊♦  ♦◊♦  ♦◊♦

Gracias por la ayuda~.


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