Cuando leyó el ultimo comentario, Ling Yi reaccionó más rápido que Fang Juexia y giró la laptop hacia otro lado apresuradamente.
“Bueno, eso es más o menos lo que pasó…”
A Fang Juexia no le parecía gran cosa. Al fin y al cabo, en el mundo de internet, una mentira repetida las suficientes veces termina volviéndose verdad.
Justo cuando estaba por cambiar de tema, Jiang Miao salió de la cocina con un cuenco de sopa.
“Juexia, Qiang-ge llamó hace rato, dijo que tienes que ir a la compañía para una reunión. Ah, por cierto” añadió, “Xiao Pei ya está allí.”
“¿Ahora?”
“Sí.”
Bajo la presión maternal de su líder de grupo, Fang Juexia no tuvo más remedio que terminarse la sopa antes de dirigirse a la empresa.
Lo que no esperaba era que incluso el jefe estuviera presente. Aunque Xingtu era una agencia pequeña, su dueño, Chen Zhengyun, solía estar ocupado y rara vez se aparecía por la oficina.
“Llegaste. Siéntate” dijo Chen Zhengyun, con las manos entrelazadas, sentado en el centro de la sala de reuniones. Le indicó que tomara el asiento junto a él.
Fang Juexia obedeció y, desde el otro lado de la larga mesa, vio a Pei Tingsong. Este, con un gorro de lana gris cubriéndole los ojos, estaba recostado en la silla durmiendo tranquilamente. No podía ser otro.
“Xiao Pei, despierta” lo llamó Cheng Qiang desde su lugar. Pei Tingsong, medio dormido, se subió el gorro y se lo quitó, despeinándose el cabello con desgano. Su rostro, de rasgos marcados, emergió como una figura nítida de entre la niebla, sus ojos afilados apuntaron directamente a Fang Juexia.
“Al fin llegaste” dijo, sin un ápice de cortesía, en cuanto despertó.
Pei Tingsong no apartaba la mirada de él, y Fang Juexia instintivamente giró la cabeza para evitarla. Pero en el proceso, su marca de nacimiento quedó a la vista, enfrentándose a la mirada de Pei. Le recordó a una flor que había visto de niño en un jardín, de pétalos alargados y de un delicado rosa pálido, idéntica a la forma de la marca en la esquina de su ojo izquierdo.
“Desde anoche, ustedes dos han estado en las búsquedas calientes. Lo que nos tomó por sorpresa a todos” dijo Chen Zhengyun, mirando a su asistente. “Informa sobre la situación.”
Aunque el suceso había sido inesperado, Chen Zhengyun no perdió tiempo y puso a alguien a recopilar y analizar datos. La presentación era extensa, pero Fang Juexia permaneció en silencio, escuchando, mientras sus ojos ocasionalmente se desviaban hacia Pei Tingsong, quien, aparentemente, estaba volviendo a dormirse apoyado en la mesa.
“Más o menos así está la cosa. No solo en Weibo y los índices de búsqueda de Baidu, incluso en sitios menos activos los datos son muy alentadores” el asistente sonrió. “Más altos que cuando Kaleido debutó.”
Pei Tingsong soltó una risa sarcástica con los ojos cerrados.
Así que no estaba dormido. Fang Juexia lo miró de reojo, solo para descubrir que este abrió los ojos al mismo tiempo. Sus miradas se cruzaron de repente y los ojos de Pei, estrechos y profundos, intensamente claros, lo miraban con una fuerte agresividad.
“Aunque fue algo inesperado, el impacto es innegable. Ustedes saben que en estos dos años, el desarrollo de Kaleido no ha sido el mejor” continuó Chen Zhengyun, observándolos alternativamente. “La razón por la que estamos aquí es para discutir los planes a futuro.”
Fang Juexia entendía lo que estaba ocurriendo. El jefe, aunque estricto, siempre había sido razonable con sus artistas. Incluso cuando el grupo no lograba despegar, nunca los forzó a tomar cualquier oportunidad para ganar visibilidad, a menos que ellos mismos lo pidieran.
El debut de Kaleido había sido apresurado, y el grupo había sido objeto de burlas como los “cinco desechos más un paracaidista“.
En aquel entonces, gracias al éxito del grupo senior, especialmente con Shang Sirui como la cara del grupo, había llevado a Xingtu a aprovechar la oportunidad para lanzar una nueva boyband. Fang Juexia, que había sido un candidato estrella en una gran compañía, era naturalmente el centro perfecto.
El bailarín principal, Lu Yuan, ganó en el pasado un campeonato de un importante concurso de Hip-Hop. Sin embargo, después de la competencia, fue expulsado de su anterior grupo de baile debido a disputas por la distribución de recursos y beneficios. Tras varios altibajos, terminó en Xingtu.
El vocalista principal, Ling Yi, nació con una voz excepcional. Desde pequeño participó en concursos de canto para niños. Lamentablemente, en uno de ellos solo obtuvo el segundo lugar porque uno de los participantes tenía “conexiones”. A los diecisiete años compitió en otro programa de talentos, pero nuevamente quedó fuera de la final por falta de influencias. Posteriormente, fue descubierto por un cazatalentos de Xingtu y entrenó como aprendiz durante tres años y medio antes de debutar.
El líder, Jiang Miao, fue estudiante del Conservatorio Central de Música y domina el guzheng. Sin embargo, debido a las dificultades económicas de su familia, tuvo que mantener a su hermana menor, llegando a trabajar como streamer tocando el guzheng. Desafortunadamente, su popularidad era baja porque no mostraba su rostro. Fue entonces cuando un cazatalentos de Xingtu lo descubrió y lo convirtió en aprendiz.
En cuanto a los dos raperos del grupo, sus antecedentes son aún más “misteriosos”.
He Ziyan, desde muy joven, estuvo involucrado en bandas de música underground y trabajó como cantante residente y DJ en bares. Tiene un talento notable para la música electrónica, pero nunca ha hablado de dónde viene ni de su familia.
Pei Tingsong, en contraste, es el único del grupo que nació “con una cuchara de oro en la boca”. Antes del debut, fue “paracaidista”, lo que significa que se unió al grupo de manera abrupta, desordenando los planes y la estructura previamente establecida para incluir a este joven maestro.
No obstante, no se puede negar que las habilidades de Pei Tingsong en el rap y la composición están entre las mejores de la industria. A pesar de tener solo diecinueve años y haber debutado hace dos años, combina una familia influyente, talento sobresaliente y una apariencia atractiva. Con un “paquete completo” como el suyo, resulta difícil que no sea arrogante.
“Yo no pienso hacerlo” dijo Pei Tingsong sin rodeos, mientras giraba un bolígrafo entre sus dedos.
Chen Zhengyun lo ignoró y miró a Fang Juexia.
“El departamento de planificación ha trabajado horas extra en un nuevo proyecto” dijo mientras su asistente distribuía copias de la propuesta. “La idea es ajustar la estrategia de marketing. En pocas palabras, queremos que tú y Xiao Pei promocionen una CP como pareja. No tienen que exagerar, basta con que muestren algo de camaradería.”
Las palabras golpearon profundamente a los dos. Desde su debut, ambos habían tenido roces constantes. Fang Juexia prefería mantener la distancia y evitar problemas, mientras que Pei Tingsong tenía una inclinación por provocarlos.
“Es una gran oportunidad. Si logran aprovecharla, su carrera tomará un nuevo impulso.”
Fang Juexia miró el documento en sus manos, inmóvil. Los recuerdos de todos los enfrentamientos y conflictos con Pei Tingsong se agolparon en su mente. Hasta ahora, había evitado conflictos para mantener la paz en el grupo. Pero si aceptaba esto… las cosas podrían fácilmente salirse de control.
“Jefe, creo que prefiero no participar en esto de las CP” dijo finalmente, levantando la mirada.
Antes de que Chen Zhengyun pudiera responder, Pei Tingsong ya se estaba irritado.
“¿No quieres formar una CP conmigo?” dijo, arqueando una ceja con aire burlón. “Dame una razón convincente. ¿Acaso no soy lo suficientemente guapo o es que no tengo suficiente dinero?”
Su tono era descaradamente provocador, pero Fang Juexia no reaccionó.
“¿Entonces estas realmente interesado en formar una CP?” replicó Chen Zhengyun con ironía, dirigiéndose al mánager. “Anota eso, Xiao Pei está de acuerdo.”
“No lo estoy” Pei Tingsong puso los ojos en blanco, visiblemente frustrado.
“Pues parece que te importa bastante.” Chen Zhengyun fue demasiado vago para seguir discutiendo y dirigió su atención nuevamente hacia Fang Juexia, su tono más serio.
“Juexia, esto no solo los afecta a ustedes dos, sino a todo el grupo. Si no quieres, está bien, pero sería perder una oportunidad valiosa. Y para ser sincero, aunque no esté de acuerdo, desde que esto llegó a las búsquedas, ya están vinculados para el público. Aunque no quieran.”
La implicación era clara: mejor aceptar la situación y convierte lo pasivo en iniciativa.
Fang Juexia lo miró fijamente:
“Simplemente no me gusta esta forma de hacerlo.”
“No es una forma, Juexia, es una oportunidad” replicó Chen Zhengyun con calma. “Ustedes seis, en términos de habilidad, podrían obtener resultados mucho mejores que los actuales. Pero sin oportunidades, eso no sirve de nada.”
“¿O es que ya olvidaste lo que me dijiste cuando recién entraste a la empresa?”
El corazón de Fang Juexia se encogió de repente.
Había dicho que quería estar en el centro del escenario.
Pero ahora… no tenía escenario.
Aunque el debut del grupo había sido el resultado de muchas coincidencias, la empresa había puesto todo su empeño en ellos. Incluso el nombre de Kaleido fue idea de Chen Zhengyun, inspirado en la palabra “kaleidoscope” para representar la naturaleza cambiante y versátil de un caleidoscopio. Todos sabían el significado detrás del nombre y las expectativas que llevaba consigo.
Sin embargo, el éxito de un grupo dependía de demasiados factores.
Las palmas de Fang Juexia comenzaron a sudar ligeramente, mientras sus nervios estaban tensos como cuerdas. En ese momento, su teléfono vibró de repente. Su mano tembló al sacarlo, y al ver quién llamaba, su ceño se frunció aún más.
“Disculpen, necesito salir un momento.”
Chen Zhengyun asintió y decidió aprovechar la pausa para salir a fumar. La sala de reuniones quedó vacía salvo por Pei Tingsong y Cheng Qiang.
Pei Tingsong, aburrido, comenzó a garabatear en la propuesta con un bolígrafo. Quiso escribir su nombre, pero apenas había trazado una P cuando escuchó a Cheng Qiang suspirar. Levantó la vista y notó su expresión preocupada.
“Qiang-ge, ¿Qué te pasa?”
El apodo de “Qiang-ge” había nacido de un malentendido de los fans. Durante un recibimiento en el aeropuerto, los demás lo llamaron “Qiang-ge”, pero los fans lo escucharon mal y comenzaron a llamarlo Qiangge. Pei Tingsong pensó que era gracioso y también lo adoptó.
Cheng Qiang soltó un bufido irritado.
“No empieces, no sabes lo enojado que estoy de solo pensarlo…”
Mientras tanto, Fang Juexia deambulaba por los pasillos hasta encontrar una sala de reuniones vacía en el mismo piso. No quería contestar la llamada, pero sabía que no podía ignorarla. El subdirector Yang no solo era parte del equipo del programa que grababa, sino también un miembro influyente de la plataforma donde se transmitía. Como un idol menor sin mucha relevancia, ya había rechazado demasiadas cosas de esa persona.
“Subdirector Yang.”
La voz al otro lado de la línea había cambiado, ahora sonaba amable, casi conciliadora.
“Ah, Xiao Fang, ¿no estás ocupado, verdad? Mira, admito que ayer perdí los estribos y dije cosas fuera de lugar. No lo tomes a pecho, ¿sí? Sabes que te aprecio mucho. Es solo que, cuando alguien me importa, a veces me impaciento…”
La palabra “aprecio”, dicha con ese tono, le provocó náuseas. Fang Juexia guardó el teléfono en el bolsillo y ajustó los auriculares inalámbricos.
“Subdirector, ya dejé clara mi postura…”
“Escúchame primero, hijo. Ayer estuviste en las búsquedas calientes, ¿no fue emocionante? Tienes mucho potencial, ¿sabes? Eres guapo, tienes habilidades. Lo único que te falta es una buena plataforma para despegar.”
Cada palabra añadía más peso al asco que Fang Juexia sentía. Podía imaginarse al hombre, gordo y arrogante, con una sonrisa lasciva y una mano pesada en su hombro, hablando con la misma voz repulsiva que ahora se filtraba por los auriculares.
“Subdirector Yang, si insiste en forzarme…”
Antes de que pudiera terminar, Yang subió la voz en un tono de reprimenda:
“¡¿Forzarte?! ¡Esto no es forzarte! Es un ganar-ganar. Es lo que todos hacemos aquí. Mira, sé que fue tu compañía la que compró ese lugar en las búsquedas caliente, ¿verdad? Bien hecho, así es como se debe promover a alguien, Pero, escúchame, en este negocio, siempre hay caras nuevas que brillan. Si no aprovechas este momento, la fama se irá y todo ese dinero será en vano. ¿Entiendes lo que te digo?”
La voz estridente de Yang atravesaba los auriculares como una corriente eléctrica, rompiendo cualquier vestigio de orgullo que quedara en Fang Juexia.
En ese momento, se sentía como un producto barato, colocado en un estante al alcance de cualquiera, su interior destrozado y envuelto en una frágil carcasa plástica. Aunque no era completamente forzado, estaba siendo desgastado por las palabras y las expectativas.
Yang continuó, ahora con tono más confiado:
“La clave de la exposición es un reality show. Y déjame decirte, tu empresa no tiene los contactos que yo tengo para conseguirte un programa en televisión nacional…”
El mareo y las náuseas aumentaron. El cansancio, combinado con la falta de comida, le hizo tambalearse. El ruido en los auriculares parecía un zumbido ensordecedor.
“Los programas de internet son cosa del pasado. Lo que necesitas es televisión nacional. Si confías en mí, puedo prepararte algo a tu medida…”
De repente, un frío roce en su mejilla lo trajo de vuelta.
La náusea desapareció junto con el auricular que alguien había retirado de su oído. La sensación de vacío y silencio lo envolvió, como si se hundiera en las profundidades del océano.
“Subdirector Yang.”
Una mano se posó con desgano en el hombro de Fang Juexia, haciendo que se quedara inmóvil. Giró la cabeza, aturdido.
Desde el otro lado del teléfono, el tono dominante del subdirector Yang se detuvo en seco. Las palabras halagadoras se desmoronaron torpemente al escuchar una nueva voz. Había algo en esa voz, baja cínica y burlona, que no cuadraba. No era Fang Juexia.
“He grabado todo.”
